miércoles, 16 de enero de 2013

El matrimonio de Zeus y Hera.


Zeus y Hera.


 Zeus es famoso por sus conquistas de muchas mujeres mortales y otras diosas.
Muchos mitos muestran a una Hera muy celosa de estas conquistas amorosas, y enemiga sistemática de todas las amantes de Zeus y de los hijos que tenían con él. Por esta razón, se le considera protectora del matrimonio. Durante un tiempo, una ninfa llamada Eco tuvo el trabajo de distraer a Hera de estas aventuras hablándole incesantemente; mandada por Zeus. Cuando Hera descubrió el engaño, maldijo a Eco a pronunciar sólo las palabras de los demás.
Hera también se representa despreciando profundamente a Ganimedes, un muchacho troyano a quien Zeus llevó al Olimpo para ser copero de los dioses, además de erómeno suyo, es decir, un adolescente comprometido en una pareja pederástica con un hombre adulto.

Nacimiento de Zeus y cómo se convierte en el dios de los dioses.

Todo ocurrió cuando Rea dio a luz a el hijo de un titán llamado Crono. Este tenía la intención de comerse al recién nacido que recibía el nombre de Zeus; ya que, como habían predicho Urano y Gea, un hijo suyo le quitaría el trono. Rea por el dolor y la angustia adquirida después de ver como todos sus hijos eran deborados, decidió sustituirlo por una piedra. Crono no se dio cuenta.
Avanzaron los años, y cuando Zeus descubrió lo que había ocurrido con él y con sus hermanos, decidió encabezar una lucha contra Crono de la que salió victorioso. Y éste, quedó encerrado junto con el resto de los Titanes para no salir jamás.
Tras la guerra con los Titanes, Zeus y sus hermanos (que habían sido vomitados por Crono anteriormente), decidieron repartirse los poderes; quedando Zeus como el dios soberano. 

Zeus, dios de todos los dioses.


Zeus, es el más poderoso del Panteón griego, el Padre de los dioses y de los hombres. Es una divinidad de origen indoeuropeo, dios de la luz, del cielo y de los fenómenos atmosféricos como el rayo, el relámpago, el trueno… Se dice de Zeus, que es “el que amontona las nubes” Zeus es el padre de todos los dioses, y como tal, protege la casa y la familia. Es purificador del matrimonio, guardián del orden social y defensor del derecho. Dirige el universo y las relaciones entre hombres y dioses, desempeñando el papel de árbitro y castigándolos cuando le parece oportuno.